Cuídate fué lo último que salió de su boca... y su mirada fija en el rumbo que le esperaba sin más ni menos se fué, de
Sobre los trozos de vidrio en el suelo recuerdo haber visto el reflejo de mi cara con el fondo estrellado, y el cielo de un azul petróleo, y de día se asomaban las gaviotas como mofándose de mis pensamientos y el cielo de un azul muy parecido a ese par de ojos que jamàs volveré a ver, cerré los ojos e intenté dejar de pensar en eso, pero las tristezas se intercalaban y si no era una era la otra...
ahora entiendo tantas palabras, es verdad que llegar a Santiago te intoxica, y te enamoras de lo que está allá afuera, lo único que anhelo es poder salir otra vez... voy a poner todo mi empeño ya que se me viene un año extremadamente duro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario